Cree en luchar incansablemente, pero con justicia y dentro del marco legal. Constantemente logra resultados sobresalientes para sus clientes gracias a su disposición de trabajar más duro y su capacidad de pensar mejor que la contraparte.
Como muchas personas, Scott no proviene de una familia de médicos ni abogados. Utilizó préstamos estudiantiles para financiar sus estudios de derecho y aprendió de sus padres el valor del trabajo duro.
Scott comprende cuando las víctimas de lesiones graves se sienten impotentes y enojadas o tienen inquietudes sobre cómo pagar sus facturas médicas. Desde la primera reunión, los clientes perciben su sincera empatía. Scott continúa apoyando a cada cliente durante todo el proceso legal y, a menudo, incluso después de la resolución del caso.